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INGREDIENTES
8 limones
1 vaina de vainilla
1 litro de alcohol fino
1 kg de azúcar
1 y 1/2 litro de agua
Lavar muy bien los limones, cepillándolos. Secarlos con papel de cocina.
Pelar los limones y cortar sus pieles (sólo la parte amarilla) en Juliana; colocarlas en un recipiente ya esterilizado, agregarles
el alcohol y dejarlas macerar durante 30 días.
Almíbar
Poner el azúcar, el agua y la vaina de vainilla en una cacerola. Llevar la mezcla al fuego. Cocinar durante 10 minutos
a partir del primer hervor. Retirar el almíbar del fuego, tapar y dejar enfriar.
Filtrar el líquido de la maceración de las pieles de los limones y mezclarlo con el almíbar. Desechar las pieles.
Envasar el licor en botellas esterilizadas.
Tapar con corchos nuevos, previamente hervidos, y dejar estacionar durante 1 mes, agitando las botellas cada 2 días, en
la heladera o en un sitio fresco y oscuro.
Guarde el lemoncello en la heladera o preferentemente en el freezer, y consúmalo bien helado. Suele espesarse, pero, debido
a su elevado contenido de alcohol, no llega a congelarse.
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